La artrosis en perros es una enfermedad degenerativa que afecta a las articulaciones de nuestras mascotas, causando dolor y limitando su movilidad. Es una condición común, especialmente en perros mayores y de razas grandes.
En este artículo, exploraremos en detalle qué es la artrosis canina, sus causas, síntomas y los tratamientos más efectivos. También discutiremos medidas preventivas que pueden ayudar a reducir el riesgo de desarrollar esta enfermedad. Si tu perro muestra signos de dolor o rigidez, es my importante actuar rápidamente para mejorar su calidad de vida. ¡Acompáñanos y descubre cómo cuidar mejor de tu fiel amigo!
¿Qué es la artrosis canina?
La osteoartritis o artrosis en perros es una patología de carácter genético y gradual, por lo que el perro suele ir adaptándose a la misma, lo que hace complicado detectar sus dolores.
Esta enfermedad es consecuencia del desgaste continuo del cartílago articular por encima de lo normal, lo que produce a los perros dolor y les limita progresivamente la movilidad de la articulación afectada.
¿Qué puedo hacer para prevenir la artrosis en mi mascota?
Lo primero que debes tener en cuenta es que hay dos posibles causas que pueden generar la artrosis en perros; puede tener un origen primario, es decir, sin motivos conocidos y que sea de carácter hereditario, o bien secundario, debido a una enfermedad articular, como la displasia de codo y cadera. Es cierto que debes prestar especial atención si tu perro es raza mediana o de gran tamaño, ya que son particularmente vulnerables. Sabiendo esto, debes tener en cuenta qué factores pueden desencadenar o empeoran esta enfermedad para prevenir la artrosis en tu perro.
Recuerda que es muy importante hacer revisiones periódicas con tu veterinario de confianza para prevenir y detectar la artrosis canina. Un seguro veterinario para perros hará que esta labor sea un mero trámite.
¿Qué ocasiona la artrosis en perros?
El tamaño del perro. Como te contábamos, el tamaño es uno de los factores básicos que influyen en la artrosis en perros, ya que esta enfermedad está estrechamente relacionada con los canes de mayor tamaño, como pueden ser los Pastores Alemanes, los Rottweillers.
El envejecimiento. La edad es uno de los principales desencadenantes de esta enfermedad debido a la degeneración óseo-articular. Sin embargo, el hecho de que tu perro se haga mayor no implica directamente que vaya a padecer esta enfermedad.
El sobrepeso. Si hablamos de perros grandes y además con sobrepeso, son claros pacientes potenciales de esta enfermedad. Además de tratarse de perros grandes, los kilos de más provocan que los cartílagos de las articulaciones se desgasten mucho más rápidamente al estar expuestos a una mayor carga.
Síntomas de la artrosis en perros
Como te comentábamos al inicio del post, se trata de una enfermedad gradual a la que el perro se va adaptando, lo que dificulta que nuestra mascota manifieste claramente los síntomas. Sin embargo, el dolor en la zona de la articulación, la reducción del movimiento en la zona o la atrofia muscular, son los síntomas más claros y los que van a condicionar la conducta del perro y sus desplazamientos, siendo la cadera una de las zonas más propensas.
Estos síntomas, al igual que en los humanos, se agravan en las épocas de frío al intensificarse los dolores con las bajas temperaturas. A causa de los mismos, tu perro mostraría comportamientos que son los que realmente te darán las pistas necesarias para sospechas si padece o no artrosis:
-Andar rígido.
-Cojera.
-Aparente dificultad o pereza a la hora de subir y bajar escaleras.
-Dificultad al levantarse.
– Se muestra reacio a las caricias y a jugar.
-Se queja al tocar la zona.
Diagnóstico de la artrosis en perros
Lo primero que debes hacer si aparece cualquier limitación articular o de movimiento en tu perro es acudir a tu veterinario. Tras un reconocimiento clínico se le realizará un examen radiológico para profundizar en la enfermedad y determinar cómo será su evolución en la medida de lo posible.
Debes saber además que algunas articulaciones están más expuestas que otras como pueden ser el codo, la cadera y las rodillas.
¿Cuáles son los tratamientos más utilizados para la artrosis en perros?
Entre los tratamientos más empleados destaca la toma de antiinflamatorios, ya sea por vía oral o bien por inyección. Antes de recetar estos medicamentos, el veterinario tendrá que estudiarlos minuciosamente, ya que pueden generar algunos efectos secundarios.
Además, existen tratamientos alternativos como la acupuntura y la hidroterapia, los cuales son muy beneficiosos para mitigar los dolores de los perros provocados por la artrosis. Recuerda que todos estos tratamientos están cubiertos con un seguro médico para perros. No dudes en informarte sobre ellos si crees que tu mascota puede llegar a necesitar alguno de estos tratamientos.
Después de este post, ¿piensas que tu perro puede tener artrosis? Entonces acude cuanto antes a tu veterinario y sal de dudas; cuanto antes empiece tu mascota con el tratamiento, mejor. ¿A qué esperas?